Hasta el momento no se ha confirmado el agente portador y el mecanismo de transmisión del coronavirus que ha surgido en China, aunque se cree que tiene un vínculo con los mercados de mariscos y venta o contacto con animales de corral o salvajes en el Asia Oriental. Hasta ahora se ha confirmado la transmisión de humano a humano.
Aunque autoridades de México descartaron por completo la presencia del coronavirus en el país, el mundo entero continúa alerta, buscan el origen de la cepa, así como la posible vacuna.
Una de las investigaciones que llama la atención, sobre todo en redes sociales, es la publicada hace unos días por algunas revistas científicas.
Según un estudio dado a conocer por la revista Science China Life Sciences, que fue patrocinado por la Academia de Ciencias de China en Beijing, el nuevo coronavirus está estrechamente relacionado con una cepa existente en los murciélagos.
Al respecto, los investigadores señalaron que “el hecho de que los murciélagos sean los anfitriones nativos de Wuhan CoV (coronavirus) sería un razonamiento lógico y conveniente, aunque todavía es probable que haya huéspedes intermedios en la red de transmisión de murciélagos a los humanos".
Dicho estudio no especuló sobre qué animal podría haber sido un “huésped intermedio”, pero un segundo estudio de la Universidad de Pekín, publicado en el “Journal of Medical Virology”, identifica a las serpientes como posibles transmisores.
Por otra parte, la revista “New Scientist”, publicó una investigación en la que comparó el genoma de cinco muestras del nuevo virus con 217 virus similares recolectados en varias especies.
La conclusión fue que el nuevo coronavirus, identificado como 2019-nCoV, tiene coincidencia con el virus que se encuentra en los murciélagos, pero se parce más al virus que se encuentra en las serpientes.
Cabe mencionar que la sopa de murciélago es un platillo común en China, y tras darse a conocer la información relacionada con el coronavirus, surgieron innumerables fotos de dicha sopa, un platillo ampliamente consumido en Wuhan.
La sopa de murciélago, conocida por los turista como “Fruit bat soup” se prepara con murciélago cocido abierto, y es acompañado con fruta o leche de coco.
Refieren que sabe a “caldo de gallina” y desde hace mucho tiempo los médicos han advertido de lo tóxica que puede ser para los humanos. En aquella región el murciélago también se consume de frito o hervido.
Además de China, el murciélago se consume también en Indonesia y otras regiones de Asia.
