De acuerdo con los datos publicados por la OMS, más de un millón de personas de 15 a 49 años se contagian cada día por una infección de transmisión sexual (ITS) curable. Esto se traduce en que anualmente, a nivel global, se registran más de 376 millones de nuevos casos de cuatros infecciones en particular (antes conocidas como enfermedades venéreas): clamidiasis, gonorrea, tricomoniasis y sífilis.
En México, según los datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), 30% de las personas que se encuentran entre los 18 y 30 años han padecido o tienen una enfermedad de transmisión sexual.
“Estamos preocupados por el poco progreso que se ha hecho para detener la propagación”, detalló Peter Salama, director ejecutivo del programa de Cobertura Universal en Salud de la OMS. Por su parte, hizo “una llamada de atención para un esfuerzo concertado que busca asegurar que todos, en cualquier lugar, puedan acceder a los servicios que necesitan para prevenir y tratar estas enfermedades”.
Por tanto, las recomendaciones de la organización son tener relaciones sexuales seguras, especialmente mediante el uso del condón, así como mejorar las condiciones para el acceso al diagnóstico. Y es que, el preservativo es el método anticonceptivo más efectivo para prevenir enfermedades de transmisión sexual.
Según Javier Ribas, portavoz de Sincable.mx, tiene una eficacia del 97 por ciento. La importancia de este método de prevención es especialmente trascendental en países en desarrollo. Para asegurar su eficiencia es aconsejable comprar aquellos que estén homologados por una autoridad sanitaria, con la certificación CE correspondiente.
Las investigaciones para llevar una vida sexual sana continúan avanzando y ahora incorpora una nueva modalidad. Un ejemplo claro es la creación de los alumnos de la escuela Isaac Newton Academy de Londres: el S.T Eye. Un preservativo que cambia de color si detecta Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS). El proyecto ha despertado el interés de empresarios que desean invertir dinero en el prototipo para lograr su comercialización.
De manera que, el látex cambiará a verde si tuvo roces con clamidia, amarillo si fue con herpes, azul para sífilis y morado ante el HPV (virus del papiloma humano), responsable del cáncer en el cuello del útero, ano y pene, entre otros males.
Muaz Nawaz, Daanyaal Ali y Chirag Shahson son los mentores de la propuesta y aseguran que se trata de “toda una innovación en el mundo de las enfermedades de transmisión sexual”. De manera coloquial, el preservativo es conocido como “semáforo” y funciona como test de ETS. Pero, ¿cómo es posible? La encargada de este avance es una molécula que puede ponerse de un color específico cuando se le adhiere algún virus.
“Queríamos crear algo para que la gente esté más segura y pueda tomar acción inmediata en la privacidad de sus hogares, sin temor a los procedimientos aterradores que se hacen en los consultorios médicos”, mencionó Ali sobre el proyecto.